La guerra de las exclusivas

 

Donde no se dan tregua los fabricantes de consolas es en la obtención de títulos exclusivos para sus máquinas, hecho que inclina la balanza de compra hacia una u otra consola.

Últimamente la batalla está más sangrienta que nunca. Microsoft parece tener una chequera infinita para convencer a los estudios para que abandonen, aunque sea temporalmente, su vínculo vital con PlayStation. Lo consiguió con Grand Theft Auto en su día, Final Fantasy XIII más recientemente, y en este E3 ha conseguido que la peor pesadilla de Sony se haga realidad: Hideo Kojima, creador de la saga Metal Gear, anunciando en la conferencia de Microsoft una entrega para Xbox 360. Así fue, y Metal Gear Solid: Rising será una realidad en 2010.

PlayStation se asegura para sí otro Metal Gear Solid, no sin gritos de traidor proferidos a Kojima, y un sorprendente Agency de la mano de RockStar, padres de Grand Theft Auto. Así mismo, Kratos, el protagonista de God of War, asegura su permanencia en la consola de Sony por una nueva temporada.

Por supuesto, las estrellas de Nintendo no van a ninguna parte, y este año serán Mario y Link, protagonista de los Zelda, los encargados de mantener fiel a la audiencia.