La violencia y los Videojuegos

 

Despues de una dura jornada de trabajo, al hacer la ronda diaria sobre lo nuevo con lo que amanece el dia me encuentro una noticia que me a dejado realmente helado , lo que nos faltaba para que nos censuren los juegos del futuro….

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Los detalles que dio en sus primeras declaraciones Pablo Luis B. B. sobre cómo procedió a descuartizar y guardar en la nevera el cuerpo de su hermana, María Luisa Blanco, provocaron las arcadas en algunos de los presentes. Y las preguntas sobre cómo era posible que un joven de 34 años sin experiencia en carnicería tuviera semejante destreza en unas circunstancias tan terribles. La respuesta de Pablo Luis B. B., según fuentes próximas a la investigación, fue muy sencilla: le gustaban mucho las películas «del de la máscara», las había visto muchas veces, y también había aprendido mucho jugando en la consola.

El personaje de la máscara al que posiblemente se refería Pablo Luis B. B. es Jason Voorhees, protagonista de la saga de terror «Viernes 13» que hasta la fecha y desde la primera entrega («Viernes 13», 1980) ha dado para trece películas. Jason, como se le conoce popularmente, es un asesino en serie al que identifican su máscara blanca de jugador de hockey sobre hielo y su machete, herramienta con la que habitualmente ataca a sus víctimas.

Los videojuegos han explorado desde el principio (también los juegos tradicionales) la violencia. La casquería más realista (en sus gráficos y métodos) llegó a principios de los noventa con «Mortal Kombat» y el realismo se multiplicó a finales de la década con su inclusión en los juegos de punto de vista subjetivo, tipo «Duke Nukem» o «Quake». En la actualidad la violencia sigue dando buenos argumentos al sector.